Un Viaggio In Questa Vita

pasearnos en medio del caos por el bulevar como hicimos en un principio el clima se vuelve tosco las palabras se arriman, se abrigan pasamos a ser reparo, un refugio donde soltamos las sombras para siempre se agarran, transforman siguen danzando mientras no las miramos seguimos caminando si el paso es lento afuera está raro la campera azota el viento la piel, junta, se aguarda para hacerle frente.

 cómo hacer para esquivar  las manos que aparecen que atrapan todo lo que está latiendo cómo sacarme de encima la sensación de querer de desear salir del más acá y llegar hasta las pestañas ajenas  cómo desmembrarme para sentirme libre si con el aroma ya es suficiente cómo reconocerme estando en la habitación propia si no puedo hallarte en ella. cómo sacarte del escondrijo de agosto sin que se me vaya la energía cómo traerte hasta mí sin que te cerciores de la mirada que es infinita que no quiere amarrar sólo contemplarte.

 El día que nos conocimos el viento soplaba  casi me llevaba volando hasta la plaza. La voluntad del cielo era mover los cuerpos enbarbijados todos deseando el contacto sin quererlo. El viento, feroz soplaba, me sacudía las heridas por eso, me costaba creer que vos, en medio de tanto aire movedizo hayas empezado a darme tanta paz.

 Hay algo que me lleva a escribir en cursiva también a hablarte desde esta forma dibujada, sentida narrarte, de todas  las maneras posibles ojalá esto sea para tenerte cerca creer que desde la palabra que es siempre pasado pueda tocarte encontrar las esquinas simbólica, todas para hallarme a mí también.