Mapa

Poco a poco me empezaron a gustar desde tus pestañas hasta tu alma.
Volaba por tus montañas de emociones, no podía ni quería evitarlo, sólo me volvía adicta un poco más.
Caí varias veces en esos lugares, donde nadie más estuvo y mis ojos aún se animan a mirar más allá.
Tantas oraciones quebradas, tantas palabras por decir. Quedaron un poco estancadas, pero fueron otra vez iluminadas.
Un día decidiste por vos solo, agarrar mi mano, ¿acaso es tu sueño o es el mío? Esto no es muy lúcido. No puedo manejarlo. El compás está lejos de mí, no logro escuchar el canto para poder conducir en esta ruta entremezclada.
Soles y lunas giraron una vez, pero aún así, no querían ser vistos, uno hecho para el otro, necesitaban esconderse.Luces perdidas fueron encontradas, aún no querían ser mostradas.
Los pétalos de aquel otoño, y de cada una de las estaciones en las que fueron, quieren romperse, no quieren ser más recordados.
Libradas de batallas las golondrinas empezaron a volar, no querían volver al mismísimo lugar donde sus mentirosos hogares fueron destruidos. El cielo ancho y alto, podía sentirse, desde la respiración hasta los latidos.
Las lanas se fueron juntando, no podían permanecer separadas, el viento soplaba queriendo llevarlas.
Tenor, tono de gloria, como sacado de algún cuento milagroso. Podía escucharse aquellas notas en toda la sala, no parecían dejar de sonar nunca, las guardaría por siempre.

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